¿Hasta cuando en Argentina?

El stream se está volviendo un aspecto imperialista, ya que invade todos los rubros. Cada vez son menos los streamers de raza y cada vez más los músicos, standuperos, famosos, periodistas, deportistas y famosas adoptadas por stream.

La comunidad crece día a día, pero las grandes “armys” peligran mes a mes. Argentina se está volviendo un país insostenible, hay quemas, virus, inseguridad, y lo que más afecta a las organizaciones, presión fiscal.

Los equipos compiten mayormente en los mejores niveles de League of Legends, Counter-Strike, etc. La inscripción a estos torneos son en dólares, al igual que los contratos a los gamers.

Comunidades como la Coscu Army, 9Z, Isurus o Malvina Gaming, tienen altos gastos que afrontar y cobran menos de lo que deberían. Estas empresas son sponsoreadas por muchas empresas internacionales como: Aurus, Twitch, Nike, Alcatel, HyperX, Claro y Nimo TV, entre otros.

Estas empresas le giran en dólares a las “armys” y por políticas económicas del país, les entra un dólar a $78 cuando les tendría que entrar a $180, lo que quiere decir que cada vez que reciben un pago cobran la mitad del mismo.

Otra de las trabas que le presenta Argentina a los gamers, al igual que a todos los argentinos, es el impuesto a la ganancia. Cada competencia que gane una comunidad tiene un premio económico, premio que puede llegar hasta cerca de D$S 900.000, de ese premio el país retiene entre el %42 y %45, y recuerden que además pierden más de un %50 ya que entra al valor del cambio oficial.

Los equipos tienen gamers que residen en otros países y cobran entre D$s 1.000 y D$s 9.000, lo que significa que las organizaciones cobran al dólar oficial y deben pagarle a sus jugadores a precio de dolar blue.

Estas organizaciones pierden cada vez más dinero y varios gamers ya están buscando nuevos horizontes para vivir y para su residencia fiscal. ¿Hasta cuando en Argentina?